¡3 años volando!

¡Un nuevo año comienza y el blog cumple a su vez un nuevo año de vida!

Pues sí, El vuelo de Tsubame ya está cumpliendo su tercer aniversario en la red y yo me alegro un montón por todo lo que este espacio ha significado para mí y lo mucho que ha crecido con el paso del tiempo. Jamás de los jamáses me hubiera imaginado que llegaría tan lejos, creo que lo repetiré hasta el cansancio. El año pasado fue uno bastante duro (mi papá falleció en septiembre a causa de un cáncer de pulmón y los meses previos fueron difíciles de llevar), de hecho fue el que menos entradas tuvo en este cielo virtual, pero a pesar de ello no me desaparecí y continué escribiendo. Y, considerando que la universidad también me quitó tiempo, creo que hice lo mejor que pude para no dejar que el blog agarrara polvo.  Quiero agradecer, como acostumbro a hacer en este tipo de entrada, a todos: a los lectores silentes, a los comentaristas ávidos y constantes, a los pájaros de paso, a mis compañeros de vuelo e incluso a los que entran por equivocación y hacen efecto de rebote; ustedes han hecho de este blog algo más que un ejercicio de escritura y método de desahogo para este gusto tan culposo y obsesivo que tengo como hobby que es el anime y, a veces, el manga. Ya casi serán 100.000 visitas en total y mi corazón salta de alegría al pensar en ello. 

Sé que tal vez hayan mejores críticos y reseñas allá afuera pero me basta con que alguien se emocione por algo que haya escrito yo, siga mi recomendación y con suerte, le haya gustado lo que vio. Ya saben que continuaré con mis Primeras Impresiones, con mis Tsubame opina, mis Recomendaciones llenas de plumas, los bocadillos musicales que suelo preparar, los rincones de manga, alguna que otra entrada de Pensamientos -porque a quién engaño, siempre vuelvo a ellas- y ya veré si me atrevo a escribir semanalmente otra vez sobre algún anime de temporada (como hice con Made in Abyss y Mahoiku en sus respectivos años). Y por supuesto, entradas nuevas también serán bienvenidas.

Así que también les digo: hagan caso omiso a esos estudios especializados que dicen que los primeros días del año son los peores para iniciar las nuevas metas, yo creé este cielo virtual un 3 de enero de 2016 y aquí me tienen, luchando contra la inconstancia y feliz de seguir 3 años después.

Espero que este 2019 traiga puras cosas buenas, nuevas series de las cuales comentar y que finalmente logre tachar en él algunos de esos eternos pendientes. Ansío que este año por estos cielos cibernéticos siga siendo divertido y emocionante. 

¡Hasta la próxima y a por más años de vuelo!